Hermes fue hijo de Zeus y de Maya, la más pequeña de las pléyades. Nació el cuarto día del mes, y ya desde su nacimeinto demostraba una precocidad extraordinaria: consiguió desatarse de las bandas con las que se envolvía a los recién nacidos y escapar hasta Tesalia, donde Apolo (su hermano) pastoreaba los rebaños de Admeto. Cuenta la historia que, mientras Apolo estaba distraído con su amor por el hijo de Magnes, Hermes le robó el ganado, llevándoselo hasta una caverna en Pilos. Al llegar a la entrada de la cueva encontró una tortuga, la cual vació y tensó sobre la cavidad de la concha unas cuerdas fabricadas con los intestinos de unos bueyes que había sacrificado del ganado de su hermano. Así contruyó la primera lira.Mientras, Apolo iba buscando su ganado por todas partes. Cuando llegó a Pilos, Bato (un anciano que había visto a Hermes esconder el ganado, y cuyo silencio no pudo comprar) le descubrió el escondite. Debido a esto, Apolo fue a Maya (su madre) a quejarse de los robos de su hermano, pero ella le mostró a Hermes envuelto en pañales y le preguntó cómo era posible que acusase de eso a un niño. Apolo requirió la presencia de Zeus (su padre), quien ordenó a Apolo que restituyese los animales robados. Sin embargo, Apolo, que había visto la lira en la gruta y oído los sonidos que emitía, se sintió seducido por ella, y cambió su ganado por el instrumento.
Más tarde, Hermes, guardando los rebaños robados a su hermano, inventó la flauta. Apolo quiso comprarle éste instrumento, y por ello le ofreció como pago un cayado de oro que utilizaba para guardar los rebaños de Admeto. Hermes, además, le pidió lecciones en el arte de la adivinación, en la cual Apolo estaba muy versado. Apolo aceptó el trato, y de aquí surgió que la vara de oro (el caduceo) figure entre los atributos de Hermes. Zeus, satisfecho de la habilidad y actividad de Hermes, lo nombró su heraldo, poniéndolo a su servicio particular, y al de los dioses infernales Hades y Perséfone.Éstas leyendas son las únicas en las que Hermes es el personaje principal. Hay muchas historias en las que desempeña un papel secundario, pero primordial, y en todas sus victorias se deben a su habilidad. Salvó a Ares, sacándolo de una vasija de bronce, en la que dos gigantes lo habían metido. También salvó a Zeus en la lucha contra Tifón, quitándole al montruo los tendones del dios. Luego, con la ayuda de Pan, volvió a unir los tendones a Zeus, pudiendo proseguir el combate.
Por todo esto, era el dios olímpico mensajero, de las fronteras y de los viajeros que las cruzan, de los pastores y las vacadas, de los oradores y el ingenio, de los literatos y poetas, del atletismo, de los pesos y medidas, de los inventos y el comercio en general, de la astucia de los ladrones y los mentirosos.
Se le representa calzado con sandalias aladas, cubiéndose la cabeza con el pétaso (un sombrero de ala ajcha) y empuñando el caduceo (un cayado de oro), símbolo de sus funciones de heraldo de los dioses. Puede aparecer con la lira o la flauta, instrumentos que inventó.
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